jueves, 5 de marzo de 2009

VIAJE AL CORAZÓN




Siempre me produce escalofrios (algo físico) contemplar el paso del Hombre por la tierra.
El desarrollo humano es paralelo al desarrollo geológico. ¿Qué somos en el universo?

Pasamos por la vida viviendo la cotidianidad como si nada transcendente pasara. Puede que quizás no esté pasando nada o ¿si?. Somos parte del universo y éste se mueve para bien o para mal. ¿ Qué significa que se mueva para bien? Supongo que cuando el desarrollo supone progreso, al menos progreso humano. Para mi progreso humano supone vida en plenitud. Sin embargo ¿qué supone plenitud?
La humanidad ha ido evolucionando también según las técnicas que desarrollaba, piedras para cazar, hierro cocinar, oro para ennoblecer. Los sentimientos sin embargo varían, según el momento que te toca vivir pero siguen siendo los mismo ante la muerte, ante un nacimiento. Seguimos sintiendo lo mismo cuando nos enamoramos, cuando nos sentimos abatidos, tristes. ¿Hemos evolucionado entonces la humanidad?
Y qué suponen esos sentimientos, una simple química más. Esa química que puede hacer de un carbón un diamante, o de una composición de minerales una vasija para calentar el agua.
La vida en mi produce admiración, sorpresa todavía. Me alegro, porque eso significa que sigo viva. Sin embargo no es suficiente, necesito saber que vivo por algo y para algo. En el fondo me da miedo pensar o sentir esto que expreso. Porque he experimentado que cuando vives sin pensar, sólo haciendo gestos, acciones determinadas, entonces es cuando realmente estas viviendo. Es decir cuando lo cotidiano lo vivo paso tras paso, gestos tras gesto, sin pararte y ser consciente de lo que vivo es cuando la vida va fluyendo como un manantial que brota incansable.
Sin embargo cuáles son las acciones que me llevan a sentirme y experimentarme en lo cotidiano. Por qué me siento parada, sin fluir, como agua estancada.

Simplemente habrá que esperar al momento justo de la evolución.
La tierra minera parece ahora quieta, “sin explotar” a la espera de que alguna empresa, siempre extranjera, invierta y saque de ella los bienes que la hacen rica. Son momentos en la vida, unos de quietud, otros de estremecimientos, otros de productividad… y así siempre.

El día de Andalucía viajé al corazón de la tierra, cada día viajo a mi corazón y te busco pero no te encuentro. Espero encontrarme en el corazón de la humanidad y disfrutarte.

2 comentarios:

Karen Dinesen dijo...

¡Genial Bely! Has plasmado por escrito tu reflexión sobre el vivir.Eso es estupendo. debes seguir.Tú hablas de vivir por algo y para algo...bely; "vivir para vivir". Ahora que lo expreso me suena que Serrat lo dice en una canción. Es fundamental mantener la capacidad para sorprenderse. Y eso lo tienes. Es motivo para vivir cada momento si estamos atentos a lo que la vida nos ofrece.Me alegré un montón al ver que habías escrito. Espero que cuando te sientes frente al ordenador, priorices publicar algo en tu blog.Un abrazo
P.D. (bonito el título)

Anónimo dijo...

la pelicula es bien documentada